Va llegando la hora después del apogeo en la que el sol se va consumiendo para decir adiós por un momento y volver al rato, es el ciclo de las cosas, lo que muere, nace y vuelve a morir. De esta manera también sucede con la música y los discos, por eso Danicattack se va despidiendo de su primer álbum de estudio, homónimo de su propuesta celebre:"Volar Lejos Volar Lento".
"A Través del Vidrio" es la última poética encargada de decirle adiós a este magnifico trabajo de larga duración que quedó guardado en nuestras memorias, ligado a experiencias de la banda dónde también estuvimos y que alimentaron todo el proceso expresivo de sus canciones. Los vimos saltar, gritar, ver a su público en Rock Al Parque, compartimos la encendida de la luz en el Bengala Music Fest y hoy alzamos la mano para dar suerte al próximo rumbo a donde los lleva la música.
Con esta propuesta audiovisual y performativa contrastan su producción frente al resto de piezas ya hechas, el brillo y la belleza de los cristales puesto a los costados de los ojos de los protagonistas se comunica junto a la gama de colores y la piel al natural, llena de las marcas de pasar por este mundo, casi todos bajo la tercera década de su nacimiento en el mundo. Las caras conocidas nos aseguran empatía, de esa que duele porque desarma.
Siendo un monologo en crisis, la canción es una posibilidad abierta del devenir del sentido humano, una carta de invitación a manera de ejemplo como mano guía en el pedregoso camino del encuentro personal. Del espectro emocional y artístico total de las 10 canciones que conforman "Volar Lejos Volar Lento" es otro pico en plenitud.
Y sin embargo, la música de la agrupación no siempre es sencilla de digerir, quizá ahí reincide el valor histórico que hasta ahora, tras unas trescientas escuchas, somos capaces de comprender. He ahí la razón de desearles suerte, pues de lo que viene, nuevo material para un disco, esperamos lo mejor, ya nos hemos hecho a la idea.
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